La Tre Valli Varesine 2024, una de las carreras más tradicionales del calendario ciclista italiano, fue suspendida a causa de las lluvias torrenciales que inundaron las carreteras de Varese. La decisión de detener la competencia se tomó después de que varios ciclistas, entre ellos el reciente campeón del mundo Tadej Pogačar, expresaron su preocupación por las condiciones extremadamente peligrosas en las que corrían. La suspensión ocurrió a 110 km de la meta, después de que los organizadores redujeran la distancia original a 170 km debido al mal clima, pero aun así, la lluvia no dio tregua.
La carrera, que arrancó con normalidad, se desarrolló bajo una intensa y persistente lluvia, lo que provocó que el agua se acumulara en las carreteras y desbordara los desagües en algunos tramos. Enric Mas (Movistar), Georg Steinhauser (EF Education-EasyPost), Felix Engelhardt (Jayco–AlUla), Lorenzo Germani (Groupama-FDJ), Romain Bardet (Team dsm-firmenich PostNL) y Tobias Foss (Ineos Grenadiers) lograron realizar un ataque temprano, pero la situación empeoró rápidamente.
Tadej Pogačar, quien recientemente había ganado el Mundial de Ruta en Zúrich y corría su primera competencia con el prestigioso maillot arcoíris, fue uno de los más activos en expresar su preocupación por la seguridad. «Intentamos competir y lo hicimos bien hasta que pudimos», explicó Pogačar en declaraciones a los medios después de la suspensión. «En la última vuelta, en la bajada, estaba en segunda posición detrás de [Alessandro] Covi y no podíamos ver hacia dónde íbamos». La visibilidad limitada y el agua estancada hicieron que los corredores se vieran obligados a detenerse en la zona de meta para hablar con los organizadores y los comisarios de la UCI.
Pogačar fue claro sobre los peligros que enfrentaban. «Era solo cuestión de tiempo que alguien se estrellara», señaló el ciclista esloveno. «Cuando hay agua estancada, no es bueno. Esos son los peores accidentes, cuando pierdes el control del manillar y te vas por encima de la bicicleta. No es como resbalarte en el asfalto, donde si tienes suerte, te haces unos cuantos rasguños. En estas condiciones, los golpes pueden ser mucho peores». El campeón del Tour de Francia también expresó su preocupación por las conmociones cerebrales, un tema recurrente en el pelotón. «Conozco a muchos amigos del pelotón que han sufrido conmociones cerebrales este año. Es algo con lo que tenemos que tener más cuidado».
Ante estas preocupaciones, la UCI y los organizadores de la carrera, encabezados por Renzo Oldani, optaron por suspender definitivamente la carrera. Oldani, visiblemente afectado, lamentó la decisión pero reconoció que era la más correcta para proteger a los corredores. «Fue una decisión difícil. La seguridad es lo primero, tanto para los corredores como para los espectadores», declaró Oldani. «Esto duele después de un año de duro trabajo, pero al final del día, no podíamos seguir en estas condiciones».
El organizador también elogió la actitud comprensiva de los corredores y mencionó que había sentido su frustración y tristeza por no poder competir. «Pude ver lo pesado que era para el jefe de la organización. Había lágrimas en sus ojos», comentó Pogačar. «Esta carrera significa mucho para ellos, es una carrera hermosa, pero cuando no puedes competir, no puedes. Lo entendieron de inmediato, y estoy realmente agradecido por eso».
El grupo de corredores, encabezado por Pogačar, agradeció la disposición de los organizadores para priorizar su seguridad y prometió volver el próximo año para una revancha en mejores condiciones. «Estamos tristes por la cancelación de la carrera, pero es así. Hablamos con los organizadores y, por suerte, todos fueron razonables», añadió el esloveno, quien se retiró al autobús de su equipo UAE Team Emirates para una ducha caliente y una merecida pausa tras la peligrosa jornada.
La Tre Valli Varesine es una carrera de renombre que forma parte de la preparación final de muchos ciclistas de cara a los últimos monumentos de la temporada, como el Giro de Lombardía. A pesar de la cancelación de este año, la carrera mantiene su prestigio, y se espera que en 2025 regrese con más fuerza, con la promesa de un clima más benévolo para los competidores.