Durante las celebraciones del día de San Valentín es común gastar y generar un desajuste en el bolsillo, por eso, es prudente ser precavido, o mejor aún, destinar ese capital en aspectos más redituables como abrir un plan de ahorro o inversión.
¿Eres de los que pasará solo el día de San Valentín? ¡Ánimo! … tienes mayores probabilidades de lograr tener unas finanzas personales saludables. ¡Tus finanzas te apapachan!
Y es que, al parecer, el amor obliga a gastar siempre a las parejas en este gran día, pues de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros de (Condusef), 7 de cada 10 mexicanos que acostumbran celebrar el Día de San Valentín, considerando una inversión que en promedio va de los 650 a los 1,452 pesos[i].
Durante esta celebración, es común que se pueda gastar una cifra significativa y generar un desajuste en el bolsillo, por eso, el no derrochar en artículos o detalles que no representa una necesidad real, ofrece la oportunidad de destinar ese capital en aspectos más redituables, como abrir un plan de inversión, un seguro o mejor aún, ahorrar para el retiro.
Hoy en día, con 1,500 pesos puedes iniciarte en el mundo de las inversiones y asegurar un futuro prometedor, que, sin duda elevará tu capacidad de formación de riqueza patrimonial.
De acuerdo con el especialista en finanzas, Guillermo Seañez, Director Comercial de Old Mutual México, el amor se parece a una inversión, porque entre más definan una meta, establezcan prioridades y estén más comprometidos obtendrán mejores resultados. Y, si invirtiéramos en nuestro futuro tanto como invertimos en regalos o detalles, cuando tenemos una relación, no tendríamos que preocuparnos por la jubilación.
Por otro lado, para los que se encuentran en un noviazgo o viven en pareja, el especialista recomendó no hacer gastos excesivos y privilegiar el ahorro de acuerdo con la necesidades personales que cada quien tiene, a mediano y largo plazo.
Indicó que para los que viven “el amor”, también se abren posibilidades de construir un patrimonio sólido si se basan en la honestidad, generosidad y, por supuesto, en una buena administración sustentada en un presupuesto y planes de inversión adecuados.
Enfatizó que el correcto manejo de las finanzas, puede ser un factor que lleve a lograr una relación de pareja duradera y exitosa: “hasta que la muerte los separe”, más cuando se aborda con franqueza, transparencia y frecuencia. “Compartir metas y la prioridad que tiene cada una de ellas en su vida crea lazos fuertes de apoyo y unión. Las parejas que están en sincronía en temas como ahorro y presupuesto se sienten más seguras financieramente y discuten menos sobre el dinero.”
De acuerdo con Old Mutual, entre las metas financieras más comunes de las parejas en México destacan la creación de un fondo de contingencia familiar -por si alguno de los dos se queda temporalmente sin empleo o surge alguna eventualidad médica-, la compra de una casa, un auto, la educación de los hijos, las vacaciones familiares y por último el retiro.
Finalmente el experto declaró que, una relación óptima, tanto en el plano sentimental como el económico, es aquella que debe garantizarnos estar en la “mejor situación posible”, es decir, en donde sintamos que estamos recibiendo algo que compensa lo que entregamos, por lo que sugirió tomar en cuenta los siguientes consejos para disfrutar de unas finanzas sanas en pareja:
Tips:
– Hacer un presupuesto que permita controlar gastos e incrementar el ahorro.
– Contar con un fondo para emergencias equivalente a al menos seis meses del sueldo.
– Contratar seguros para cubrir riesgos: desempleo, casa, auto, salud, etcétera.
– Seguir un plan de ahorro disciplinado. Iniciar con un ahorro mensual del 10% de su ingreso familiar es un buen comienzo.
– Incrementar su cultura financiera para sacarle más provecho a su dinero con decisiones acertadas de inversión. Ambos deben participar en la planeación.
– Diversificar ingresos. Ello da seguridad y certeza al cumplimiento de las metas financieras.
– Manejar un nivel de endeudamiento no mayor al 35% del ingreso mensual neto.
– Elaborar un plan financiero (de inversión) para cada meta.