29 de Mayo de 2024
El pasado domingo, un ataque a un campo de desplazados en Rafah dejó al menos 46 muertos, incluidos 23 mujeres, niños y ancianos. Medio centenar de expertos de la ONU calificaron el ataque como «indiscriminado y desproporcionado» y afirmaron que Israel no puede eludir su responsabilidad alegando que fue «un error».
Los expertos subrayaron que atacar áreas donde se refugian desplazados palestinos, muchos de ellos mujeres, niños, discapacitados y ancianos, constituye «una grave violación de las leyes de la guerra». Este incidente resalta la necesidad de que la comunidad internacional actúe y rinda cuentas.
Además, los expertos exigieron una investigación internacional e independiente sobre el incidente. Recordaron que el martes 28, un ataque similar en el oeste de Rafah provocó la muerte de 21 palestinos, 13 de ellos mujeres.
En respuesta a estas violaciones de derechos humanos, los expertos enfatizaron la urgencia de detener inmediatamente el suministro de armas a Israel, citando pruebas de que estas se utilizan para matar y mutilar cruelmente a civiles palestinos.
Entre los firmantes del comunicado se encuentran Francesca Albanese, relatora de la ONU para Palestina, y Paula Gaviria, relatora para los derechos de los desplazados internos.