La situación con la inmigración ilícita en EE.UU. agudiza la polarización política en el país y provoca una oleada migratoria en todo el hemisferio occidental.
El número de inmigrantes arrestados en la frontera entre EE.UU. y México desde el 1 de octubre del 2021 superó por primera vez los 2 millones de personas, comunicó este lunes la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU.
Washington culpa a países latinoamericanos con gobiernos no amistosos para EE.UU. del crecimiento de la inmigración ilícita. «Regímenes comunistas fallidos en Venezuela, Nicaragua y Cuba provocan nueva oleada de migración por todo el hemisferio occidental, incluyendo el aumento reciente de enfrentamientos en la frontera sureste de EE.UU.», señaló el Comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza, Chris Magnus, citado por Washington Post.
Mientras tanto, los republicanos y demócratas se acusan unos a otros del crecimiento de la inmigración ilícita. La Administración Biden declara su aspiración a crear un sistema de inmigración más «seguro, ordenado y humano», y culpa al exmandatario Donald Trump de «desmantelar» vías para la inmigración legal. En cambio, los gobernadores republicanos de los estados de Florida, Texas y Arizona envían a los inmigrantes a estados gobernados por demócratas.