07 de Octubre de 2024

El mole poblano, símbolo de la gastronomía de Puebla, es el platillo predilecto para festejar ocasiones especiales como cumpleaños, bodas o graduaciones.

Con más de 20 ingredientes, mezcla elementos prehispánicos y europeos, como chiles secos (ancho, mulato, pasilla), especias (clavo, canela, anís), almendras, chocolate, y tortillas, que se combinan para crear un guiso de sabor único. Tradicionalmente, se sirve con pollo, guajolote o cerdo, y puede acompañarse de hierbas como los romeritos.

Según varios historiadores, el mole poblano se originó en el Convento de Santa Rosa, en el Centro Histórico de Puebla, donde en el siglo XVII, las monjas dominicas buscaban sorprender al obispo Don Manuel Fernández de Santa Cruz y al Virrey Conde de Paredes.

Se cuenta que, mientras preparaban la receta, las cocineras indígenas mencionaron «mullí» al describir la mezcla espesa de ingredientes, lo que luego fue interpretado como «mole» por la madre Andrea de la Asunción. El convento, que ahora es el Museo de Arte Popular Ex-Convento de Santa Rosa, permite a los visitantes conocer su histórica cocina, famosa por sus azulejos de talavera y amplios fogones.

El 7 de octubre se celebra en Puebla el Día Estatal del Mole, decretado en 2020 para honrar este platillo tradicional. Si deseas sumarte a la celebración, puedes disfrutar de un plato de mole con pollo, unos envueltos o incluso una torta de mole.