12 de Agosto de 2024
“Ha sido una experiencia asombrosa. Todos los días que hablo con mi mamá le digo que me quiero quedar aquí”: Sofía Batura, estudiante de intercambio.
Movida por el deseo de practicar su español con nativos, Sofía Batura, estudiante de Lingüística en la Ural Federal University, llegó a México y a UPAEP para vivir una experiencia de intercambio estudiantil. Un mes fue suficiente para que la joven rusa se enamorara del país al grado de querer quedarse y hacer de los tacos parte de su dieta diaria.
Y es que pese a que el cambio fue total: las calles, el clima, la gente, el colorido, la comida, aseguró su estancia en UPAEP ha sido su mejor experiencia.
“Tenemos muchas diferencias entre países, pero me adapté fácilmente. Es muy bello y todas las calles están muy iluminadas y las personas siempre te saludan, todos son muy amigables”, compartió.
No obstante, el choque cultural fue inevitable, principalmente en el ambiente académico, pues dijo, en Rusia se enfocan más a los estudios, y aquí los mexicanos logran combinar el estudio con la fiesta. Así mismo, dijo, los profesores en su país natal son más serios, y el sistema es más autodidacta, te entregan lecciones y tú tienes el deber de entender. En cambio en México, se siente una relación más estrecha y los profesores siempre explican el tema para que no haya dudas.
Confesó que en un inició estaba nerviosa y ansiosa porque no podía comunicarse apropiadamente con las personas, y aunque no tuvo compañeros mexicanos pues en sus clases compartió salón con colombianos, peruanos, franceses alemanes y finlandeses, los mexicanos le parecieron muy amables y siempre se le acercaban para saber más de ella.
Finalmene“La primera semana fue un poco difícil porque todos nos querían abrazar, besarnos, yo no entendía. Pero creo que el tener muchas personas a mi alrededor ayudó a hacer de esta experiencia la mejor. Ha sido una experiencia asombrosa, todos los días que llamo a mi mamá le digo que me quiero quedar aquí”, relató.
Otro aspecto que contrastó mucho en su día a día fue, el clima, pues en Rusia la temperatura llega a menos 30 grados y todo luce gris y triste en ocasiones, en cambio aquí, siempre vió la luz del sol. Cosa que, asegura, contribuyó mucho a su estado de ánimo y mantenerse siempre positiva.
En UPAEP, Sofía cursó 4 materias: Español Avanzado, Cultura de México, Cultura Digital y Morfosintaxis del Inglés, de las cuales su favorita fue Cultura de México.
“Encontré interesante conocer más sobre política de México y su historia previa. Hubo muchos hechos que me impactaron, porque en Rusia hice mi examen y yo no sabía algunos datos históricos que me vine a enterar por una película que nos proyectó el profesor”.
Entre las dificultades con el idioma, destacó, hay palabras con doble “R” que le cuesta trabajo pronunciar y su palabra favorita en español fue “caramba”.
Por otro lado, en el aspecto gastronómico, si bien fue un cambio radical, su comida favorita son los tacos, los cuáles las primeras semanas se rehusaba a probar por que en Rusia no hay puestos callejeros y le parecían poco higiénicos, pero una vez que tomó confianza, quería comerlos todos los días.
“Los tacos es lo más delicioso, pero algo que no volvería a probar son los chapulines y el picante me ha provocado problemas en el estómago, pues no estoy acostumbrada a comer tan picoso”, compartió.
Finalmente, Sofía Batura, agradeció a toda la Comunidad UPAEP y a México por la hospitalidad, y no dudo en recomendar a sus compañeros Rusos, el venir de intercambio en los próximos semestres.