Viernes, 6 de junio de 2025
Un grupo especializado en economía de la salud de la Universidad de La Rioja (UR) ha anunciado su salida de un proyecto europeo centrado en el desarrollo de biomarcadores para el diagnóstico temprano de la esquizofrenia. La razón: el proyecto está liderado por una institución pública israelí, el Instituto Tecnológico Technion.
La universidad informó que la renuncia se fundamenta en la intención de preservar la reputación institucional, en un contexto donde han aumentado los llamados a romper vínculos académicos con centros israelíes. Organizaciones como Amistad por Palestina y Acampada por Palestina habían solicitado públicamente a la UR retirarse de este tipo de colaboraciones.
El proyecto, que cuenta con una financiación total de 7,9 millones de euros provenientes de fondos europeos, involucra a una veintena de instituciones académicas de diez países. El equipo riojano tenía asignado un monto de 188.750 euros, destinados en parte a la contratación de dos investigadores, que ahora no podrá concretarse.
El estudio en el que participaban buscaba medir el impacto económico de la detección precoz de la esquizofrenia, un trastorno que afecta aproximadamente al 1 % de la población mundial y cuya tasa de diagnóstico erróneo puede superar el 30 %. La iniciativa incluía la detección de compuestos orgánicos volátiles en fluidos corporales y piel como parte del protocolo de diagnóstico.
La decisión llega en un momento en que persiste el debate sobre la cooperación académica internacional en contextos de conflicto. En mayo de 2024, la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) ya había manifestado su disposición a revisar acuerdos con centros israelíes que no asumieran un compromiso claro con la paz y el derecho internacional humanitario.
Con esta renuncia, la UR se convierte en una de las primeras universidades públicas españolas en traducir dicho pronunciamiento en una medida concreta.
