La Rectora Lilia Cedillo encabezó una ceremonia para celebrar el décimo aniversario de este espacio universitario
Con más de 10 mil metros cuadrados de construcción, un acervo de casi 130 mil volúmenes, así como un millón de visitantes por año y dos millones 900 mil préstamos de libros, la Biblioteca Central Universitaria es un referente nacional en servicios distintivos en el ámbito de bibliotecas universitarias, refirió la Rectora Lilia Cedillo Ramírez, durante una ceremonia conmemorativa del décimo aniversario de este espacio universitario.
La doctora Cedillo Ramírez aseguró que estos últimos 10 años han sido de crecimiento, para lo cual su personal ha sido una pieza fundamental. “Recuerdo el entusiasmo impreso en cada uno de los detalles planeados de esta Biblioteca Central. Los actores de hace 10 años siguen siendo los actores de hoy, siguen siendo testigos de la consolidación de un proyecto que a todos los universitarios nos enorgullece”.
Este es uno de los edificios más emblemáticos de la Máxima Casa de Estudios en Puebla, por sus dimensiones, acervos, servicios y equipamiento. Para la funcionalidad de sus espacios se incorporan modernas tecnologías que permiten el acceso a innumerables acervos de todo el mundo. No sólo tiene como fin la consulta de libros, sino fue pensado y creado como un espacio de escape y para fomentar el aprendizaje, destacó.
Al tomar la palabra, José Jaime Vázquez López, vicerrector de Docencia de la BUAP, señaló que a una década de distancia es claro que la Biblioteca Central Universitaria ha cumplido con su función de brindar servicios de información a la comunidad universitaria, así como apoyar las actividades docentes, de producción científica y fomento a la lectura. De esta manera, su eje central es y seguirá siendo las personas.
Más tarde, enunció las tendencias o retos que tendrán las bibliotecas en un futuro cercano, como atender las necesidades de quienes las conforman y establecer vínculos para crear redes, encontrar un equilibrio entre la comunidad y la tecnología, convertirse en un dinamizador de procesos a través de la innovación, proveer y generar conocimiento.
Vázquez López comentó que el bibliotecario es un agente de cambio, por lo que la Dirección General de Bibliotecas y la Vicerrectoría de Docencia desarrollan una propuesta educativa al respecto en la institución: la Licenciatura en Archivonomía y Biblioteconomía. “La biblioteca es un eslabón más en la cultura del conocimiento y siempre albergará libros”, afirmó.
En su intervención, Alfredo Avendaño Arenaza, director General de Bibliotecas, recordó que la creación de este espacio se sustentó en la necesidad de contar con espacios dignos que ofrecieran servicios bibliotecarios de calidad. Así, el 12 de enero de 2012 se inauguró la Biblioteca Central Universitaria, proyecto cuyos recursos económicos se autorizaron en 2010 y cuya primera piedra se colocó un año después.
“El proyecto implicó la integración de las colecciones de las entonces bibliotecas de las áreas de Ciencias Sociales y Económico-administrativas “Arturo Fernández Aguirre”, de Ciencias Naturales y Exactas “Niels Bohr” y de Ingeniería y Tecnología “Luis Barragán, por lo que aunado al desafío y equipamiento de la nueva biblioteca se sumó el reto de emigrar 70 mil volúmenes y se anexaron más de 30 mil nuevos ejemplares para la creación de las bibliotecas Infantil y Juvenil, Tiflotecnia (área que permite brindar soluciones de información para personas con discapacidad visual) y Comicteca”.
Como parte de su corresponsabilidad social y solidaria con su comunidad inmediata, el maestro Avendaño Arenaza indicó que este espacio universitario aglutina distintos tipos de públicos. “Por ejemplo, la Biblioteca Infantil Karina Díaz López que antes de la pandemia recibía 100 infantes diarios; la Comicteca, un espacio para la narrativa gráfica; la colección especial Harold McIntosh, una de las más importantes de la historia de la computación en México y del mundo; el área de Tiflotecnia que transforma la información de formato físico y electrónico para hacerla accesible a personas con baja visión y ceguera, y el repositorio de acceso abierto que contiene más de 10 mil 985 tesis”.
Como parte de esta celebración se realizaron actividades en línea, a través de Facebook Live y en el canal Biblio TV BUAP, entre estas la presentación del libro El expediente de Anna Ajmátova, de Alberto Ruy Sánchez.